Arrepentimiento Profundo
Arrepentimiento Profundo
¡Ay de mí! que soy muerto; porque siendo hombre inmundo de labios inmundos...
Isaías 6:5
Normalmente hay cinco elementos para un encuentro con Cristo. El primero es la adoración elevada hacia Dios. El segundo es el arrepentimiento profundo.
Cuando Isaías vio al Señor en toda Su santidad, nadie tuvo que decirle que se arrepintiera. Su pecado fue expuesto. Su corazón estaba desnudo. No había ningún lugar para esconderse. Fue un momento de máxima vulnerabilidad.
Isaías gritó: "¡Ay de mí! Estoy perdido. Porque soy hombre de labios inmundos, y habito en medio de un pueblo de labios inmundos ".
Una de las mayores necesidades en la iglesia de hoy es el arrepentimiento profundo. Este nivel de abatimiento de huesos, de exposición al pecado, de orgullo, transparencia, vulnerabilidad y arrepentimiento solo proviene de un encuentro con la presencia manifiesta de Cristo.
Padre Amado, doy la bienvenida a tu presencia manifiesta hoy. En tu presencia expondrás mi pecado y el pecado de mi pueblo. No queremos escondernos; vengo con humildad, vulnerabilidad, transparencia y arrepentimiento, en el Nombre de Jesús.
¡Oremos Por Favor!
Estamos pidiéndole a Dios que el resto de los países ds estados de EE.UU. reciban la formación de la Escuela de Oración. Ore con nosotros hoy el mundo y lopor Nauru y Idaho.
Este encuentro diario con Cristo, que enciende el fuego, no tiene la intención de reemplazar su lectura diaria de la Biblia y el tiempo de oración, sino más bien sirve para motivarle a pasar más tiempo en Su presencia.
AÑO EN FUEGO
© Fred A. Hartley, III
Todos los derechos reservados.
A menos que se indique lo contrario, se utiliza la Biblia Estándar en inglés (ESV).
¡Ay de mí! que soy muerto; porque siendo hombre inmundo de labios inmundos...
Isaías 6:5
Normalmente hay cinco elementos para un encuentro con Cristo. El primero es la adoración elevada hacia Dios. El segundo es el arrepentimiento profundo.
Cuando Isaías vio al Señor en toda Su santidad, nadie tuvo que decirle que se arrepintiera. Su pecado fue expuesto. Su corazón estaba desnudo. No había ningún lugar para esconderse. Fue un momento de máxima vulnerabilidad.
Isaías gritó: "¡Ay de mí! Estoy perdido. Porque soy hombre de labios inmundos, y habito en medio de un pueblo de labios inmundos ".
Una de las mayores necesidades en la iglesia de hoy es el arrepentimiento profundo. Este nivel de abatimiento de huesos, de exposición al pecado, de orgullo, transparencia, vulnerabilidad y arrepentimiento solo proviene de un encuentro con la presencia manifiesta de Cristo.
Padre Amado, doy la bienvenida a tu presencia manifiesta hoy. En tu presencia expondrás mi pecado y el pecado de mi pueblo. No queremos escondernos; vengo con humildad, vulnerabilidad, transparencia y arrepentimiento, en el Nombre de Jesús.
¡Oremos Por Favor!
Estamos pidiéndole a Dios que el resto de los países ds estados de EE.UU. reciban la formación de la Escuela de Oración. Ore con nosotros hoy el mundo y lopor Nauru y Idaho.
Este encuentro diario con Cristo, que enciende el fuego, no tiene la intención de reemplazar su lectura diaria de la Biblia y el tiempo de oración, sino más bien sirve para motivarle a pasar más tiempo en Su presencia.
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