Promesa de Provisión
Promesa de Provisión
Mira las aves del cielo, que no siembran, ni siegan, ni recogen en graneros; y vuestro Padre celestial las alimenta. ¿No valéis vosotros mucho más que ellas? Mateo 6:26
Las promesas de Dios definen para nosotros lo que realmente podemos esperar de Dios cuando venimos a Él todos los días en oración.
Jesús nos dice que es justo para nosotros, como hijos de Dios, esperar que Él nos provea alimentos y ropa. Así como Dios alimenta a los pájaros del aire y provee para sus necesidades diarias, así Dios nos provee aún más.
En lugar de desperdiciar energía ansiosamente preocupado por su bienestar financiero, aprenda a orar las promesas de Dios. Tómese el tiempo ahora mismo para leer Mateo 6:25-33. Subraye las promesas que Jesús hace para su provisión física y financiera. Luego ore a Dios proclamando las promesas que Él le da.
Padre Amado, hoy me arrepiento de estar ansioso por mis finanzas. De todo corazón pongo mi fe en las promesas de Cristo: me proveerás. Estoy seguro de ello.
¡Oremos Por Favor!
Estamos pidiéndole a Dios que el resto de los países ds estados de EE.UU. reciban la formación de la Escuela de Oración. Ore con nosotros hoy el mundo y lopor Nauru y Kansas.
Este encuentro diario con Cristo, que enciende el fuego, no tiene la intención de reemplazar su lectura diaria de la Biblia y el tiempo de oración, sino más bien sirve para motivarle a pasar más tiempo en Su presencia.
AÑO EN FUEGO
© Fred A. Hartley, III
Todos los derechos reservados.
A menos que se indique lo contrario, se utiliza la Biblia Estándar en inglés (ESV).
Mira las aves del cielo, que no siembran, ni siegan, ni recogen en graneros; y vuestro Padre celestial las alimenta. ¿No valéis vosotros mucho más que ellas? Mateo 6:26
Las promesas de Dios definen para nosotros lo que realmente podemos esperar de Dios cuando venimos a Él todos los días en oración.
Jesús nos dice que es justo para nosotros, como hijos de Dios, esperar que Él nos provea alimentos y ropa. Así como Dios alimenta a los pájaros del aire y provee para sus necesidades diarias, así Dios nos provee aún más.
En lugar de desperdiciar energía ansiosamente preocupado por su bienestar financiero, aprenda a orar las promesas de Dios. Tómese el tiempo ahora mismo para leer Mateo 6:25-33. Subraye las promesas que Jesús hace para su provisión física y financiera. Luego ore a Dios proclamando las promesas que Él le da.
Padre Amado, hoy me arrepiento de estar ansioso por mis finanzas. De todo corazón pongo mi fe en las promesas de Cristo: me proveerás. Estoy seguro de ello.
¡Oremos Por Favor!
Estamos pidiéndole a Dios que el resto de los países ds estados de EE.UU. reciban la formación de la Escuela de Oración. Ore con nosotros hoy el mundo y lopor Nauru y Kansas.
Este encuentro diario con Cristo, que enciende el fuego, no tiene la intención de reemplazar su lectura diaria de la Biblia y el tiempo de oración, sino más bien sirve para motivarle a pasar más tiempo en Su presencia.
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