Pide Por Las Naciones

Pide Por Las Naciones

Yo te daré las naciones. Salmo 2: 8

Es posible que Dios no nos otorgue un privilegio mayor que el privilegio de pedir las naciones. No solo se nos alienta a pedir por las naciones, sino que Dios nos promete que nos las dará.

El Salmo 2 es claramente un salmo mesiánico, o un salmo escrito acerca de Jesús, el Cristo, el Hijo de Dios. Desde el principio hasta el final de este poderoso salmo, el Ungido, el Señor, el Cristo, está bajo los reflectores. Es a su Hijo que Dios inicialmente dice, "Pídeme, y yo te daré las naciones como tu herencia".

Es razonable que Dios nos pida que oremos por las cosas por las cuales su Hijo ya está orando. Sería solo arrogancia lo que sugeriría que debemos orar por cosas que el Padre Dios no le pediría a su Hijo que orara. Y es la falsa humildad lo que sugeriría que no debemos pedir las naciones.

Cuando Cristo pide las naciones, es para que Él sea exaltado en las naciones y para que Él las devuelva al Padre. Cuando pedimos las naciones, de manera similar, estamos pidiendo en nombre de Cristo que Él pueda ser glorificado en estas naciones y que, en última instancia, pueda devolvérselas al Padre. Mientras continuamente pide, Señor, enséñanos a orar, expanda su vida de oración y pida: Señor, enséñanos a orar por las naciones.

Tómese el tiempo ahora para pedir por las naciones. Sea específico.

Señor Dios Todopoderoso, vengo en nombre de Cristo y te pido por las naciones ...

¡Oremos Por Favor!
Estamos pidiéndole a Dios que el resto de los países ds estados de EE.UU. reciban la formación de la Escuela de Oración. Ore con nosotros hoy el mundo y lopor Kiribati y Nevada.

YEAR ON FIRE
© Fred A. Hartley, III  
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